En mi opinión, es un arte cotidiano. Atención y alegría, en medio de un entorno y procesos familiares, y sí, incluso en medio del estrés. El continuo entrenamiento visual y la pequeña cámara en mi bolsillo me sacuden continuamente y me permiten llegar al momento.
Antes de participar en mi primer entrenamiento de Miksang, pensaba que los días de lluvia eran grises. Hoy veo cómo el agua hace brillar los colores. Exploro el mundo de las gotas y los reflejos. Este es sólo un ejemplo de cómo se pueden disolver los hábitos de visualización y las configuraciones prefijadas. Esto es exactamente lo que hacen los diferentes ejercicios de percepción y tareas fotográficas de Miksang Training.
El poder de la expresión viene de la presencia, de la autenticidad y por lo tanto de un sentimiento de frescura de mi percepción ¡Qué accesible soy al mundo tal como se presenta!, no como me gustaría que fuera. La base es mi claridad al ver: ¡Click! Tomo la foto con cuidado. Me gustan las películas técnicamente bien hechas, porque eso permite al espectador sentir lo que yo vi.
Y para responder a una pregunta frecuente: No retocamos nuestras imágenes en el sentido de mejora, exageración o refinamiento. Mi referencia es siempre lo que vi. Quiero la intensidad o la palidez del color en la imagen como en el original. Y gracias a la nueva tecnología de cámara, esto también es posible para los principiantes.
Desde este punto de vista, el principio básico de la fotografía es ver las cosas como son. En su propia naturaleza ordinaria. Es muy simple y directo.
„Dharma Art“, Chögyam Trungpa, 1994 / 2012
¿Qué relación tiene Miksang con la tradición Shambhala?
La palabra Miksang es de origen tibetano y significa „buen ojo“ o, para ser precisos, „ojo purificado“. Chögyam Trungpa dio gran importancia a las artes contemplativas, pidió a los estudiantes que tuvieran una educación sólida y que combinaran este conocimiento con su enseñanza, con el arte dhármico. Percepción y expresión de nuestro ser original, abierto, lleno de coraje, claridad y confianza en el proceso. Estos principios se aplican en muchas disciplinas, ya sea el Kado, el camino de las flores, el Kyudo, el arte del tiro con arco, o la caligrafía, la poesía y la danza.
Miksang es un arte contemplativo que no funciona dentro de la organización de Shambhala, sino que tiene sus raíces en ella y siempre ha permanecido cerca de esta. Estoy particularmente entusiasmada de que este entrenamiento provea acceso a la creatividad y expresión para todo el mundo.
Hiltrud Enders forma parte del Instituto Miksang de Fotografía Contemplativa. Practica Miksang desde 2006 e imparte cursos de formación desde 2012. „Aunque nuestra experiencia como seres humanos varía mucho, nuestra percepción de la vida cotidiana y su expresión a través de la fotografía puede tener un efecto de conexión único. Es un tipo de lenguaje no verbal, visual y sensual“.
